Agricultores enfrentan al piogán de la batata.




La batata es un cultivo originario del trópico sudamericano, de donde se irradió a las Antillas y a todas las zonas tropicales y subtropicales del mundo. De las raíces y tubérculos utilizados en la alimentación humana, es uno de los más nutritivos con alto valor proteíco, superando a la papa y a los demás víveres que consume la población dominicana. La papa tiene un contenido proteíco de 1.5% a 3.5%, en cambio la batata tiene un rango que oscila entre 2% y el 8% de proteína. La facilidad del cultivo, su adaptación a una diversidad de suelos y teniendo un clima ideal para ésta planta, éste alimento debe ser promocionado para obtener una mayor producción y consumo nacional.

El enemigo más importante y a la vez el que más limita su buena producción y calidad de sus cosechas es el piogán (Cylas formicarius). En toda la geografía nacional donde se cultiva la batata, está presente éste insecto cuyo daño principal lo efectúa en su estado larval (gusano) haciendo galerías en los tubérculos de la batata y alimentándose, lo cual produce el deterioro y la pérdida de calidad y volumen de la producción de la batata.
En el pasado se idearon métodos de control de ésta plaga, que además de aportar mayores labores envueltas, mayor costo y gran contaminación del ambiente, no tuvieron ninguna efectividad visible, en la disminución de los daños ocasionados al cultivo. Desde los años 80, que se comienza a aplicar en el país las trampas con feromonas, se nota una gran eficiencia de éste método de control. Propiamente se le denomina método de control, porque no es como suponen algunos técnicos, que es para determinar la presencia del piogán y cuando estén en el umbral de una determinada población, aplicar insecticida.

Las trampas de feromonas, como lo ha señalado ese eminente Entomólogo dominicano Abrahan Abud (bamban), aplicada correctamente y en todas las plantaciones de éste cultivo, podría hasta ser erradicada ésta plaga del territorio nacional.
En la Sub-zona de la SEA de Villa González, los técnicos que trabajan en esa dependencia, se han propuesto enfrentar ésta plaga de forma intensa, comenzando con una labor de difusión a través de demostraciones de métodos y de resultados, utilizando las trampas de feromonas. El Ingeniero Juan Peralta, Director de la Sub-zona de la SEA de Villa González, dentro de las diversas actividades que desarrolla en la Sub-zona, se ha propuesto disminuir los daños que ocasiona ésta plaga a las plantaciones de batata.
En la finca del Sr. Esmeraldo Cabreja en el Ingenio Abajo, Villa González, se efectuó primero una interesante charla sobre la plaga del piogán y su control, luego la demostración de cómo efectuar correctamente la aplicación de las trampas con feromonas.
Las enseñanzas estuvieron a cargo del Ingeniero Rafael Leonel Santiago técnico del MIP, programa que es efectuado conjuntamente por la SEA y la JAD. Los agricultores asistentes a la charla-demostración, así como los técnicos de la SEA de la Sub-zona de Villa González, practicaron la forma de preparar las trampas utilizando galones plásticos y la colocación de la feromona y por último, distribuyendo las trampas en toda la plantación (80 tareas), a razón de una trampa por cada 3 tareas de terreno sembrado de batata.

La convicción de la eficacia de éste método quedó demostrado, cuando al cabo de algunas horas de aplicadas las trampas, fueron recolectadas para ver los pioganes atrapados. Ante la gran cantidad de insectos atrapados en las trampas, los asistentes quedaron convencidos de la eficacia del método de control. Las feromonas las pueden adquirir, todas aquellas personas interesadas en aplicar éste método de control, a través de los técnicos de la SEA. El precio es de $150.00 por cada feromona y como se explicó anteriormente, cada trampa se puede aplicar en 3 tareas de terreno sembradas de batata.
Las feromonas que se están importando en estos momentos, son de superior calidad y lo demuestra tanto la duración en el campo de batata, como la extensión que logra abarcar. Antes (hace algunos años), se recomendaba una trampa de feromona por cada tarea (628.5 m2) y se les sugería a los productores, reponer mensualmente las trampas. Con la calidad del producto que se está importando se recomienda, colocar las trampas a los 1.5 meses a 2 meses de sembradas las hábanas de batata, y dejarla en ese lugar hasta la cosecha. Además de que se puede triplicar la extensión de terreno utilizada, para cada trampa de feromona (una trampa para 3 tareas). Es conveniente cada cierto tiempo y principalmente cuando el galón está lleno de pioganes muertos, cambiar el agua con detergente, para evitar los malos olores y a la vez dejar espacio para los insectos que continuamente se van atrapando.

Durante la permanencia del Ingeniero Salvador Jiménez como Secretario de Estado de Agricultura, es que se les ha dado mayor importancia al control de ésta plaga y que no falte en ningún momento la feromona. La atención a todos los problemas que existen en la agropecuaria por pequeños que sean, así como también a los graves problemas que confronta, es lo que ha hecho tan frutífera la labor del actual Secretario de Estado de Agricultura. Como se sabe, el país está produciendo alrededor del 90% de los alimentos que consume. Un país que logra producir el 80% de los alimentos que utiliza su población en su alimentación, es un país que se considera que está explotando su agropecuaria de forma normal y eficiente.
Lo que está haciendo falta en estos momentos en el sector rural, es la implantación de un programa de desarrollo rural. Con ésto se lograría equilibrar el desarrollo que se observa en la población urbana y hacer la vida en el campo más placentera, progresista y con todas ó casi todas las facilidades con que se cuenta en las ciudades, para lograr el desarrollo de todas las potencialidades del habitante rural.
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